Para muchos ladrones el objetivo no es el vehículo entero sino que están detrás de sus partes individuales. Este tipo de delincuentes puede hacer perfectamente su trabajo sin abrir una puerta o ventana en el lugar del hecho, para tal efecto necesitan simplemente remolcarlo. Por otra parte, un ladrón armado con una grua de remolque puede levantar su vehículo y llevarlo lejos para luego “trabajar” tranquilo.
Hay varias buenas maneras para que un sistema de seguridad proteja contra ladrones equipados con gruas de remolque, la más difundida de ellas debe tener un "detector de inclinación". El diseño básico de un detector de inclinación es un interruptor de mercurio. Un interruptor de mercurio se compone de dos alambres eléctricos y una bola de mercurio en el interior de un cilindro de contenido.
El mercurio es un metal líquido, fluye como el agua, pero conduce electricidad. En un interruptor de mercurio, un cable (vamos llamarlo cable A) va conectado en la parte superior del cilindro en el fondo del mismo, mientras que el otro cable (B) se conecta en la parte inferior del cilindro, también sobre el fondo del mismo. El mercurio es simplemente adentro un contacto del cable A con el cable B.
Cuando el cilindro se inclina de una forma, el mercurio cambia de posición de modo que cierra el contacto entre los dos cables. Así el cierre el circuito funciona a través del interruptor de mercurio. Cuando el cilindro se inclina de otra manera, el mercurio rueda lejos de los cables abriendo el circuito.
En algunos casos y a pedido de clientes muy exigentes, se ha logrado hacer combinaciones de más de dos ampollas de mercurio pero, en general, la experiencia indica que trae más complicaciones que tranquilidad.